El  CEMIC necesita de donantes de sangre para poder cubrir las necesidades  transfusionales de pacientes quirúrgicos, oncológicos y con hemorragias.  Nuestro objetivo es contar permanentemente con donantes voluntarios, altruistas y habituales.  Esto asegura una sangre segura, ya que las  pruebas para detectar infecciones transmisibles por transfusión pueden tener  períodos de ventana (tiempo que tardan en detectarse) de hasta un año: con la  donación repetida, se verifica en forma más  frecuente la serología.